El intendente de Ushuaia, Walter Vuoto, promulgó la ordenanza que crea el Régimen Municipal de Iniciativa Privada (ReGIM), el cual en su artículo 17 adhiere al polémico Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI). La propuesta, que fue tratada sobre tablas sin debate previo en comisiones, generó un fuerte rechazo en diversos sectores sociales y políticos.
Durante la sexta sesión ordinaria del Concejo Deliberante de Ushuaia, siete de los diez concejales votaron a favor de la iniciativa. El apoyo de los concejales de FORJA, partido liderado por el gobernador Gustavo Melella, causó sorpresa, ya que el mandatario provincial había criticado fuertemente el RIGI en el marco de la Ley Bases. Melella calificó ciertos artículos como “terriblemente graves”, destacando los riesgos de la venta de recursos naturales a empresas extranjeras y las reformas laborales que perjudicarían a los trabajadores fueguinos.
Por su parte, el intendente Vuoto también había expresado su rechazo al RIGI a través de la red social X, donde señaló que favorecía a los más poderosos a costa de los sectores más vulnerables. “Para los que más tienen: menos impuestos y RIGI. Para los que menos tienen: más impuestos y menos ahorros. Para Tierra del Fuego: pagar ganancias”, expresó Vuoto antes de la aprobación de la ordenanza.
Desde la asociación ambientalista Mane’kenk, denunciaron la medida como una “entrega” de recursos y derechos constitucionales. En un comunicado, criticaron duramente la decisión y exigieron que Vuoto vetara la ordenanza. En la misma línea, el Partido Social Patagónico (PSP), señaló que los bloques del PJ y FORJA convalidaron una política económica que repudiaron a nivel nacional, exigiendo al intendente que revirtiera la decisión.
A pesar de las críticas, la concejal del PJ, Yesica Garay, defendió la adhesión al RIGI argumentando que se trata de una herramienta administrativa del Ejecutivo. Explicó que, ante la falta de recursos para obras nacionales en los municipios, la colaboración del sector privado es fundamental para que Ushuaia continúe creciendo. “El privado puede ayudar a mejorar la infraestructura”, expresó, y destacó que las Cámaras empresariales apoyaron la medida.
Sin embargo, la postura de Garay contrastó con la de su compañera de bloque, la concejal Daiana Freiberger, quien votó en contra y criticó duramente la falta de debate previo. “Nos hemos cansado de hablar en contra del RIGI, pero a la hora de votar, lo hacemos sin discutirlo”, afirmó, calificando el proyecto como un “Caballo de Troya”. En su intervención durante la sesión ordinaria, advirtió que apoyar un régimen que favorece a capitales extranjeros implica comprometer los intereses locales, y pidió a sus colegas mantener una coherencia ideológica. “Tenemos que ponernos de un lado ideológicamente y no corrernos”, señaló.
El proyecto fue aprobado por 7 votos a favor (Laura Avila, Nicolas Pelloli, Gabriel de la Vega, Yesica Garay, Fernando Oyarzun, Analía Escalante y Belén Monte de Oca) y 3 en contra (Daiana Freiberger, Vladimir Espeche y Valter Tavarone), dejando en evidencia las tensiones dentro del bloque oficialista. Con la promulgación de la ordenanza por parte del intendente Vuoto, el Régimen Municipal de Iniciativa Privada ya está en marcha.
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