El único imputado por el crimen de la mujer es su hijo, Renzo Anconetani. La fiscal Cecilia Codina solicitó se mantenga por dos meses la prisión preventiva que cumple. En tanto, el defensor público, Gustavo Oyarzún, consintió el pedido de la fiscal. La jueza Raquel Tassello resolvió entonces mantener la prisión preventiva que viene cumpliendo Anconetani hasta el 24 de noviembre próximo, día en que finaliza la etapa de investigación de la causa.
La audiencia se realizó en forma semipresencial, ya que el imputado se encuentra detenido en la localidad de Sarmiento y participó de la misma por videoconferencia.
En ese contexto, la fiscal Codina consideró que existen elementos de convicción suficientes para tener a Anconetani como probable autor del hecho que se le imputa: homicidio agravado por el vínculo.
Asimismo, sostuvo que no han cambiado los motivos por los cuales se le dictó la medida de coerción en la pasada audiencia de control de detención. A su criterio, existe peligro de fuga.
Al recordar cómo se produjo el descubrimiento del crimen, la acusadora oficial precisó que el 23 de mayo fue hallada la víctima en su casa, lo cual fue posible porque el imputado llamó a un amigo y éste ingresó a la casa, viendo a la víctima en su cama y sintiendo un fuerte olor. Regresaría luego con la policía y el imputado les dijo que había matado a su madre.
Del informe previo de autopsia se determinó que Dagotto falleció como consecuencia de una herida de arma blanca, continuó la fiscal. No obstante, aún faltan conocer medidas de prueba como el informe toxicológico, el anatomopatológico y el ADN al cuchillo secuestrado, entre otras.
La pena en expectativa para el supuesto matricida, en caso de recaer condena, sería de prisión perpetua, por las circunstancias gravísimas del caso.
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