“El domingo pasado, luego de las nevadas, fuimos convocados por un llamado al 103, para el rescate de un turista mexicano que se encontraba realizando un trekking en el Monte Susana con una empresa de turismo. Había contratado una excursión y estaba realizando esta travesía”, narró.
En esta línea, aclaró que “no es habitual que las agencias nos llamen. Normalmente no suspenden las salidas, porque tienen itinerarios y los equipan. Esta persona era robusta y producto de un patinón se lesionó el tobillo y el guía no pudo realizar la evacuación por su cuenta”.
“En este caso tuvieron este percance que hizo que convoquemos a la Comisión de Auxilio. Aunque sea el Monte Susana y esté cerca, requiere de mucho equipo”.
De igual forma, aclaró que “no fue un rescate complejo, la gente que fue a participar está entrenada. Es cerca de una hora de subida, hasta que se dio con la persona. Han hecho un mirador de madera desde el que se puede apreciar la ciudad y el aeropuerto. Luego de empaquetar a la persona y estabilizar el tobillo, se hizo el descenso. Las condiciones permitieron que no haya que asegurar la camilla más que con algún rescatista”.
“El descenso fue de cerca de 40 minutos o una hora. La persona se fue en vehículo de la empresa a la clínica, para ver cómo estaba”, siguió. Consultado por las condiciones para salir en esta época del año, dijo: “Si yo tuviese que elegir, preferiría no salir en estas condiciones, considerando que había nevado muchísimo. No sé cuánta aventura buscaban los turistas. Si la idea era divertirse, no sé si fue lo mejor”.
Y explicó que “una de las primeras recomendaciones es siempre salir acompañado. Es una de las cuestiones que nos ha pasado, con gente que sale sola y los encuentran tiempo después, sin que nadie sepa que habían salido”.
“No hacer senderos fuera del límite de vegetación, por las posibilidades de avalancha. Y, en caso de salir, hacerlo con la indumentaria adecuada. No con lo justo, sino contemplando que en caso de tener accidentes, uno necesitará permanecer inmóvil y eso puede producir una hipotermia”, subrayó.
También reflexionó sobre los “filtros” que deberían tener las empresas para determinadas excursiones: “Los parques de diversiones tienen carteles y se sacan responsabilidad. Acá la persona lesionada era robusta y, si se hizo una selección de los turistas, habría que evaluar si ameritan un control distinto. Normalmente las empresas no califican a las personas según su estado físico”.
Por último, habló sobre la temporada y destacó que están “bastante tranquilos. Nuestra temporada fuerte arranca en octubre, noviembre, hasta marzo. Años anteriores, luego de marzo no salíamos por nada. Después de la pandemia se empezó a salir con la misma frecuencia que en el verano”.
“El invierno pasado hemos llegado a salir 3 veces por semana. Este último mes hubo solo tres intervenciones. Eso nos pone contentos. Es un desgaste para los rescatistas”, culminó.
Edición:Diario Prensa Noticias de: Ushuaia – Tolhuin – Río grande y toda Tierra del Fuego.
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